recupero mi voz poco a poco…no lo había dicho, pero había perdido mi voz.
ya no podía cantar, ya no podía entonar. ni siquiera sola, en el coche, en la regadera.. nada más no podía.
tal vez no tenía qué cantar, qué decir, o qué escuchar. y poco a poco vuelve. vuelve mi voz de cristal, que se rompe de vez en cuando.
con lo pequeño que es el tiempo, con lo libre que es la soledad, con lo que duele la valentía…
episodio de mareos vestibulares, sensación de soltura, de que todo este tiempo apreté,
y ahora viene la calma,
mi cuerpo se acuerda de mi voz.
mis oídos funcionan de nuevo.
ya no hay ruido,
ya no hay tensión,
no más cuidar cada movimiento,
no más despresurización,
hoy tan sólo soy.
soy suspirando,
soy de pie y en movimiento,
soy mi personaje interno y el contrario también, eterna danza entre opuestos.
soy un mudo testigo de algunas batallas ganadas y otras perdidas,
pero soy.
soy reflejo de una necesidad de cambio
y ocupo este lugar como un canal, un templo de voluntad.
por Maricarmen Sierra
03.08.2010